Causas, remedios, y falsas miopías
Un ojo miope es aquel que enfoca los objetos lejanos por delante de la retina. Un miope tiene que recurrir obligatoriamente al uso de gafas o lentillas –u operarse- para ver bien. Su órgano visual no tiene ninguna posibilidad de hacer nada para poder enfocar los objetos lejanos.
¿Por qué tenemos miopía?
Puede ocurrir por diversos motivos. En primer lugar, porque el ojo sea demasiado grande. Es en estos casos cuando el foco cae por delante de la retina. El segundo motivo, porque los medios transparentes del ojo –principalmente córnea y cristalino- generen una lente demasiado potente, y por tanto la imagen también caiga por delante de la retina, o porque sus índices de refracción sean mayores de lo normal.
Las diferentes miopías, y sus soluciones
Existen miopías de diferentes tipos; degenerativas, congénitas, asociadas a enfermedades oculares, o simples, que no están asociadas a ninguna enfermedad y son las más comunes de todas.
La miopía simple suele aparecer, más o menos, a los cinco años de edad, y es progresiva hasta que la persona es adulta, donde el ojo ha alcanzado un mayor estado madurativo. Para corregir la miopía tenemos a nuestro alcance gafas, lentillas, o la cirugía refractiva, que se divide a su vez en dos; la cirugía láser, y la cirugía por implantación de lente intraocular.
La ortoqueratología, una opción que muchos desconocen
La ortoqueratología consiste en una técnica mediante la cual dormimos con unas lentillas rígidas, especialmente diseñadas para modificar, paulatinamente, la estructura de nuestra córnea, y hacerla sensiblemente más plana, lo que reduce el número de dioptrías y, al despertar y retirar las lentillas, veamos bien.
¿Qué consideraciones debemos tener en cuenta si somos miopes y vamos a adquirir nuestras primeras gafas?
Las lentes de los miopes son divergentes, es decir, más finas en el centro que en la periferia. Cuanto más grande sea la montura, más peso van a tener, y más gruesas van a quedar también en los laterales. Por ende, recomendamos adquirir una montura más pequeña para este tipo de casos.
Las falsas miopías
Cuando ocurre una falsa miopía, como su propio nombre indica, no existe tal dolencia, si no que el organismo experimenta determinados procesos que da lugar al equívoco. Miopía nocturna, espasmo acomodativo, así como la miopía instrumental, son las tres principales manifestaciones de esta falsa miopía.
En primer lugar, hablamos de miopía nocturna, que suele aparecer en condiciones de baja iluminación. No tiene que ocurrir necesariamente de noche, sino también en aquellos espacios que cumplan estas condiciones; una estancia o habitación en penumbra, por ejemplo. La pupila se hace más grande y genera un desenfoque parecido al miópico. Por ello, muchas personas miopes, durante la noche, sufren además una pequeña subida que únicamente es así por las circunstancias y condiciones en las que se encuentra.
El espasmo acomodativo tiene lugar cuando pasamos mucho tiempo trabajando de cerca. Obligamos al cristalino a estar constantemente acomodado para poder ver objetos cercanos –bien sea trabajando, estudiando o leyendo-, y cuando levantamos la vista y miramos de lejos, el cristalino muestra cierto “entumecimiento”, por lo que da lugar a esa falsa miopía.
En el caso de la miopía instrumental, suele estar vinculado a las profesiones u oficios; un científico que trabaje con un microscopio, por ejemplo. No se produce un desenfoque, pero si tenemos la sensación de cercanía y proximidad de objetos que, en realidad, no lo están, generando, posteriormente, un falso desenfoque.
