Disfruta conduciendo con las gafas apropiadas

Elegir las gafas oportunas para evitar accidentes

Muchos conductores presentan problemas a la hora de conducir por la noche, en horas crepusculares, con lluvia, luz solar intensa y por las molestias que les causan los faros de los otros vehículos. La visibilidad reducida es una de las principales causas de los accidentes de tráfico y que más fácilmente puede solventarse llevando las gafas oportunas.

Una buena visión a la hora de conducir es fundamental de cara a la seguridad vial. Tanto si sufres problemas de visión como si tu vista es perfecta, es posible reducir las molestias que muchos sufrimos a la hora de conducir. La vista permite al cerebro recopilar la información necesaria a la hora de tomar las decisiones apropiadas en carretera. Pero muchas veces el cerebro se encuentra con el hándicap de que los ojos no hacen bien su función al carecer de la ayuda debida, sometiendo a éste a condiciones de incertidumbre que pueden acabar en un desgraciado accidente de tráfico.

Una visión deficiente supone un riesgo importante e innecesario al volante, que puede corregirse sencillamente llevando las gafas apropiadas. Los cristales de las gafas se pueden optimizan específicamente para la circulación, con el fin de evitar reflejos, facilitar la conducción en carreteras mojadas, durante la lluvia o con luz intensa, siendo capaces de compensar los cambios en las condiciones de luminosidad.

Para ello en primer lugar si sufrimos problemas de agudeza visual, los cristales deben corresponder a la graduación actual, siendo imprescindibles las revisiones periódicas. Las monturas también juegan un papel importante, deben ser lo suficientemente grandes para no restringir el campo visual, con cristales grandes, un marco fino y las bisagras de las varillas en el borde superior. La montura debería encajar perfectamente en la cara.

Los cristales adecuados para conducir

Tratamiento antirreflejante. Reduce el deslumbramiento incluso en condiciones de poca luz. Disminuye los reflejos de los faros y proporciona una visión nítida.

Cristales polarizados. Eliminan gran parte de los reflejos que sufrimos al volante, reducen los deslumbramientos, eliminan los brillos, ofrecen una visibilidad clara de gran contraste, ayudándonos a evitar “sustos” con los vehículos que circulan en sentido contrario. Pero no se debe conducir con ellas en horario nocturno, al no haber luz solar, no hay nada que polarizar.

El tono de las lentes. Los cristales grises nos ayudan a reducir al máximo los deslumbramientos y aportan un buen contraste visual sin alterar los colores del entorno para distinguir adecuadamente las señales, indicadores de dirección, semáforos, luces de freno,… Las lentes marrones son recomendables para las personas con miopía.

El filtro amarillo ayuda en días nublados, con niebla, poca visibilidad, horas crepusculares, ya que aumentan la luminosidad. No se deben emplear como gafas de sol, en días claros ni para la conducción nocturna.

Filtro anti luz azul. No solo protege de la luz emitida por las pantallas sino que aumenta la percepción de los contrastes y minimiza el deslumbramiento, reduciendo la fatiga visual.

Los usuarios de lentes progresivas pueden contar igualmente con gafas específicas para conducir, incluso las hay especiales para conducir de día y de noche.

Si notas que te cansas mucho al volante, te estresas más de la cuenta, quizás tus ojos te estén pidiendo a gritos una revisión y puesta a punto para la conducción. Este tipo de gafas también se pueden llevan en el día a día, ven a Óptica Barreña, cuéntanos cuáles son tus problemas a la hora de conducir y te recomendaremos los cristales y tratamientos oportunos para tu caso concreto. Estamos en la calle Fatás 7 de Huesca.