La limpieza y cuidado de las lentillas
Una buena rutina de limpieza
El cuidado y mantenimiento de las lentillas es fundamental tanto para evitar que nuestros ojos sufran como para poder disfrutar de ellas al máximo. Es muy fácil hacerlo, únicamente hay que coger una rutina de limpieza con nuestras lentillas reutilizables. Conozcámosla:
- Primero, antes de tocar los ojos o el estuche, es primordial lavarse las manos.
- Debemos acostumbrarnos a empezar siempre por el mismo ojo para evitar posibles confusiones con las lentillas.
- Después de lavarnos las manos, rellenaremos el estuche con solución nueva. Lo ideal es que el estuche haya estado vacío y limpio durante el periodo en que estamos utilizando las lentes de contacto.
- Retiraremos primero una lentilla, la colocaremos en la palma de la mano y aplicaremos unas gotas de la solución que el profesional óptico nos haya prescrito.
- Frotaremos muy suavemente con un dedo, la aclararemos con unas gotitas más y la colocaremos en el estuche limpio.
- Haremos lo mismo con la otra lentilla.
No debemos olvidar de limpiar el estuche cada vez que usemos las lentillas. Por muy limpias que estén en estas, si el lugar donde se dejamos no, no hacemos nada. Así, cada vez que nos pongamos las lentillas vaciaremos completamente el estuche, lo enjuagaremos con solución y dejaremos que seque boca abajo sobre un papel. Debemos ir cambiándolo periódicamente.
En relación a los productos que se deben usar para la limpieza, a veces, tras una temporada usando lentillas olvidamos las recomendaciones de nuestro óptico y probamos líquidos de limpieza básicos. Debemos tener mucho cuidado con esto pues la elección de la solución de limpieza más apropiada para cada persona depende del tipo de lentes que use y de las características de sus ojos y de sus lágrimas.
Mantenimiento
Existen muchas posibilidades de cara a su mantenimiento, conozcámoslas un poquito:
- Solución única. Para la limpieza y desinfección diaria de las lentillas. Existen fórmulas mejoradas que aportan gran hidratación, lo que se traduce en un mayor confort visual. De ahí la importancia de no usar cualquier producto.
- Jabón limpiador. Indicado cuando queremos llevar a cabo una mayor limpieza, para eliminar los restos de grasa o depósitos que se hayan podido quedar adheridos a la lentilla. Es compatible con la solución única.
- Peróxidos. Se suelen recomendarse para personas con sensibilidades a la solución o alergias. Realizan una limpieza superior a la que lleva a cabo la solución única. Tras su uso, es recomendable aclararlas con solución de salina.
- Pastillas enzimáticas. Eliminan las proteínas que se hayan podido quedar pegadas a las lentes. Después de usarlas se deben aclarar con solución salina. Recomendadas en lentillas anuales o personas con tendencia a hacer muchos depósitos.
- Solución salina. Se utiliza para aclararlas tras su limpieza. Las personas sensibles a los conservantes de las soluciones únicas pueden usarla también tras estas.
Es muy importante nunca usar agua del grifo ni saliva en las lentillas o en el estuche.
Como hemos comentado, el uso de estos productos, depende mucho tanto del ojo como del tipo de lentilla que se use. Las lentillas diarias al ser reemplazadas cada día tendrán un mantenimiento muy diferente a las anuales por ejemplo. En Ópica Barreña os aconsejaremos cual es el tipo de producto más adecuado para vuestro caso concreto.