Cómo mejorar la audición y la calidad de vida
Todos conocemos a personas que conforme van cumpliendo años, tenemos la impresión de que oyen menos o que nos prestan menos atención cuando les hablamos. La pérdida de audición es un proceso natural que sufren muchos mayores debido al deterioro en el sistema auditivo. Se trata de una evolución natural, en el que se va perdiendo facultades progresivamente como consecuencia del desgaste de todos los órganos en general.
La pérdida auditiva puede sufrirse a cualquier edad, es una patología muy común entre la población más mayor. Generalmente comienza a manifestarse a partir de los 60 o 65 años. Por eso es muy importante atender a determinadas pistas para reconocer posibles síntomas relacionados con la ella, y poner así remedio para evitar complicaciones.
Hay que tener en cuenta por lo tanto situaciones como que la persona en cuestión asegure oír bien y, sin embargo, no entienda a la perfección alguna conversación, sobre todo en ambientes donde haya mucho ruido.
¿PODRÍA HABER EVITADO LA PERDIDA DE AUDICIÓN?
Hay factores que potencian su aparición como traumatismos, infecciones auditivas, hipertensión, diabetes u otro tipo de enfermedades. Evitarlos o corregirlos favorece el que no aparezca. Pero su factor condicionante es el envejecimiento, y éste no puede corregirse.
¿QUÉ DEBO HACER AHORA PARA MEJORARME?
Para mejorar la calidad de vida de los pacientes que han dejado de oír lo suficiente es muy recomendable el uso de audífonos ya que representan la solución más eficaz para tratar la perdida auditiva .
Los audífonos son dispositivos que se colocan en el conducto auditivo. De esta manera se pueden tratar la perdida de audición de distinta intensidad y frecuencia. Lo mejor es acudir a un audioprotesista profesional que pueda evaluarlo y decida cuál es el tratamiento que mejor se adapta a cada necesidad.
¿CÚAL ES EL PRONÓSTICO?
Los audífonos o prótesis auditivas son el elemento que puede evitar el aislamiento del paciente mayor con perdida auditiva. Para ello también es necesario que el anciano reconozca el problema, y se adapte a este dispositivo. El tipo de audífono se elegirá en función de las características de la audiometría que se le haya realizado, la edad y el presupuesto económico de la persona afectada.
Venga a revisar su audición y le aconsejaremos del dispositivo que mejor se adapte a sus necesidades.