Portada

Mitos y realidades del sentido de la vista a través de nuestros ojos

  • Blog

Desde que nos levantamos hasta que nos acostamos, en nuestra vida laboral y personal, sin ningún tipo de dudas, el sentido de la vista que obtenemos a través de nuestros ojos resulta nuestra principal herramienta para conocer el medio que nos rodea. Pero, ¿alguna os habéis preguntado cómo funcionan verdaderamente estos órganos?

 

¿Funcionan nuestros ojos como una videocámara?

Probablemente muchos de nosotros hayamos establecido, en alguna ocasión, un símil o comparación entre los ojos y una cámara de fotos y video. No resulta descabellado, ¿no? Una lente/pupila por la que entra luz, que podemos regular con el diafragma/iris para manejar diferentes enfoques, niveles de detalle y nitidez.

Por increíble que os resulte, nada más lejos de la realidad. Nuestro ojo no recoge una imagen con una resolución uniforme en toda ella. Al contrario, ya que posee una zona central a máxima resolución con la que distinguir formas y detalles con altos niveles de nitidez. Además, ¿cómo pensáis que se realiza esta captura? Es decir, para que nosotros podamos “ver” y reaccionar a un estímulo externo, nuestros ojos necesitan tener acceso a esa información visual.

vanessa-bumbeers-117971-unsplash

 

Un único centro, fijo y estático

De nuevo, podemos tener un concepto equivocado. Nuestros ojos no “retransmiten en directo” la realidad, si no que realizan “capturas”, como si de una cámara de fotos se tratase, y durante ese tiempo –que suelen ser centésimas de segundo- ese objeto o ese “encuadre” de realidad no está en movimiento.

Durante el proceso, puede que existan otros cuerpos u objetos fuera de ese centro de captura a máxima resolución y que, además, se muevan. No importa, su movimiento no va a afectar de manera significativa a nuestra capacidad para identificarlos, simplemente al no ser el centro de nuestra atención visual no los veremos en detalle, pero seremos conscientes de su presencia. Aunque salgan “movidos”.

 

Los movimientos sacádicos

Os podéis imaginar que, este proceso, en solo una hora, se puede repetir miles y miles de veces. De un objeto a otro, a diferentes distancias, con mayor y menor nitidez… Salto tras salto, nuestros ojos van haciendo capturas de realidad, que posteriormente procesamos en nuestro cerebro, y nos permite conocer nuestro entorno y actuar en consecuencia. Precisamente, a esta secuencia de saltos se denomina movimientos sacádicos.

Puede que os preguntéis, atendiendo a todo lo anterior que, ¿entonces nuestros ojos no pueden ver en detalle aquello que se mueve? Obviamente sí. Imaginaos que estamos disfrutando de una carrera de Fórmula 1, y queremos fijarnos en el bólido del conductor de nuestra escudería favorita. En realidad, nuestros ojos estarán realizando las capturas visuales exactamente igual, pero los movimientos sacádicos coincidirán con la trayectoria del objeto que nos ha llamado la atención, en este caso, el auto, de modo que nuestros ojos procederán a generar una sucesión de imágenes que, juntas, resultarán una secuencia completa en movimiento y, por supuesto, en detalle y alta resolución. Pero, en realidad, la captura nunca dejará de ser fija y estática. Curioso, ¿eh?